El masaje tantrico se origina en la India hace mas de 4000 años y se vincula directamente con el Hinduismo y el Budismo. El principio fundamental del Tantra se basa en que para llegar al crecimiento espiritual tenemos que trabajar el placer físico, sin uno no se puede obtener el otro. El Tantra cree que nuestros cuerpos pueden ser trabajados con vistas a librarse de los desperdicios acumulados, permitiendo su cura, así como la reintegración con la energia que nos envuelve. 

Esta energia vital es alimentada a través de canales llamados meridianos, cualquier obstrucción de esos canales disminuye el flujo de energia. Según el Tantra muchas de estas obstrucciones son almacenadas en nuestro cuerpo y los efectos de este bloqueo siguen reduciendo nuestro bienestar y nuestra energia a lo largo de nuestra vida. Basándonos en la creencia de que nuestro cuerpo es vital para nuestro bienestar, el Tantra usa muchas técnicas para cuidarlo y repararlo, una de esas técnicas es el masaje.

El masaje tantrico es un masaje completo por todo el cuerpo, y es que no puede ser de ninguna otra forma porque nuestro cuerpo es un conjunto, no se puede dividir en partes, ya que estas partes están todas íntimamente relacionadas formando un todo, un conjunto armonioso. A su vez este cuerpo se controla por su energía.

Energía que fluye en los chakras que son puntos estratégicos de nuestra anatomia que tienen la función de regular a nuestro cuerpo y a nuestra mente. Siendo el principal chakra el que se sitúa en los órganos genitales y se dice que es el mas poderoso pues en él está el principio de la vida, la energía inicial, la Kundalini, éste chakra está unido al resto de los chakras por medio de los meridianos, y todo este conjunto es el que gobierna nuestro cuerpo y nuestra mente. Según los tántricos el bloqueo de un chakra implica algún problema o desarreglo en nuestro cuerpo o en nuestra mente, el masaje busca equilibrar estos chakras y desbloquearlos para que nuestra energia fluya por todo nuestro organismo con toda su potencia. Unos chakras equilibrados nos hacen sentir con mas energia, con mas optimismo, mas relajados, menos tensos, mas creativos.

Desbloqueando los chakras, desbloqueamos nuestra mente.

El masaje tiene la intención de conseguir este desbloqueo y un terapeuta experimentado intentará hacer fluir libremente esa energía por todo nuestro ser, haciéndonos sentir totalmente renovados.