El principio fundamental del Tantra se basa en que para llegar al crecimiento espiritual tenemos que trabajar el placer físico, sin uno no se puede obtener el otro. El Tantra cree que nuestros cuerpos pueden ser trabajados con vistas a librarse de los desperdicios acumulados, permitiendo su cura, así como la reintegración con la energia que nos envuelve.
Esta energia vital es alimentada a través de canales llamados meridianos, cualquier obstrucción de esos canales disminuye el flujo de energia. Según el Tantra muchas de estas obstrucciones son almacenadas en nuestro cuerpo y los efectos de este bloqueo siguen reduciendo nuestro bienestar y nuestra energia a lo largo de nuestra vida. Basándonos en la creencia de que nuestro cuerpo es vital para nuestro bienestar, el Tantra usa muchas técnicas para cuidarlo y repararlo, una de esas técnicas es el masaje.